Culiacán Sinaloa, Diciembre 2020.
Nos encontramos dando un repaso de este año tan atípico en todos los sentidos, y en ese trajinar que fue para nosotros que de pronto hubiese en nuestro querido estado una pandemia que ponía en riesgo la salud de los nuestros. Los negocios se empezaron a cerrar, la psicosis se apoderó de la mayoría de nosotros, pero en el Banco de Alimentos ya planeábamos como muy atinadamente previmos, la necesidad y afectaciones económicas que se venían para el estado, por consecuencia la demanda en nuestras instalaciones de alimento. Nosotros planeábamos cómo responder, evidentemente no había experiencia en algo así, no se tenía mucho menos el alimento suficiente ni el recurso con qué responder.
A finalizar el mes de Marzo principios de Abril ya se había definido diferentes estrategias de acopio de alimento y recurso, a la par se atendían todas las recomendaciones de salud para nuestros colaboradores y beneficiarios, nos decían que ya no habría normalidad.
Mientras tratábamos de diferir lo que en materia de salud se nos venía empezamos a ver los primeros estragos de la pandemia en el Banco de Alimentos. El alimento se escaseó y a la par se encareció, esto por diferentes factores, lo primero a nuestro juicio, las compras de pánico que se hicieron en todos los comercios y la evidente falta de preparación para esta situación.
Durante el año, tanto el equipo operativo como el H. Patronato definimos juntos lo que seguía, tanto en materia de colectas como campañas. Ambas se requerían para hacer frente a las solicitudes que ya empezaban a llegar de manera bastante atípica y poco normal.
Para cuando los comercios ya tenían semanas cerrados y se prohibía el siquiera salir a las calles a una actividad que no fuera esencial, se llegó a un punto donde consideramos viable el hecho de pedir apoyo a seguridad publica para evitar la rapiña y el descontrol de la gente.
Respondimos inmediatamente a las primeras peticiones de alimento, jamás se pensó en el Banco de Alimentos de Culiacán negar la atención por falta de alimento o recurso. Para ello fue muy importante la creación del movimiento Culiacán Comparte, movimiento que en unión con demás organizaciones, sociedad civil y diferentes actores líderes de la sociedad nos abalanzamos a realizar colectas, campañas de crowdfunding y diferentes actividades que allegaran a nuestra institución de alimento, ya que en esos momentos con tantas familias nuevas empezaba a escasear.
En total, gracias al movimiento Culiacán Comparte se logró recaudar traducido en alimento, más de 224 toneladas de granos, aceite, atún, cereal, leche entre otros. Con ello se mitigaba un poco la creciente necesidad en el estado, que no disminuía con el paso de las semanas.
Por un lado teníamos que seguir atendiendo a las familias que todos los días llegaban a pedirnos apoyo, pasamos de atender a 2 municipios a atender a 6, de 15 mil a 45 mil beneficiarios en solo meses. Eso implica entre otras cosas mucho alimento.
Afortunadamente realizamos muchas actividades y colectas que nos permitieron comprar y allegarnos de alimento, en los redondeos que tuvimos con Soriana, Farmacias Moderna y Farmacón se logró recaudar más de 18 toneladas de grano que sirvieron para complementar los paquetes alimenticios de los meses más complicados para nosotros y los beneficiarios.
Otra de las más importes alianzas realizadas con empresas locales fue el ya tradicional proyecto de geles anti bacteriales con los clientes de Grupo Panamá, donde afortunadamente logramos recaudar más de 10 toneladas de arroz para beneficiar a más de 5 mil adultos mayores.
Nuestro tradicional colecta anual de alimento el HAMBRETÓN no pudo realizarse en tiempo y forma ya que los principales aliados de esta colecta son las escuelas de Sinaloa y al estar en clases virtuales y en coherencia con la situación económica actual no se realizó físicamente, se realizó de manera virtual con la participación de algunas escuelas, recaudado más de 10 toneladas de alimento.
Para cerrar el 2020 realizamos el Lechetón en su 3ra edición, y que tuvo a bien en recaudar más de 12 mil litros de este preciado alimento y que sirvió para hacer frente y mitigar la necesidad del último mes del año.
Agradecemos enormemente a todos los aliados que hicieron esto posible que si bien aún no termina, hoy que finaliza el 2020 nos detenemos a agradecerles, por su apoyo, por su confianza. ¡Muchas gracias!
